La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó el proyecto de resolución presentado por Jordania en nombre de los países árabes, que se centra en calmar la situación en Gaza, asegurar la entrada de ayuda y evitar los desplazamientos forzados. El texto, que no tiene valor vinculante, obtuvo 120 votos a favor, 14 en contra (incluidos los Estados Unidos de América e Israel) y 45 abstenciones (incluida Italia).
El embajador israelí Gilad Erdan dijo: “Hoy pasará a la historia de una manera vergonzosa, y es un día oscuro para las Naciones Unidas, que ya no tiene ningún ápice de importancia o legitimidad”.
El movimiento Hamás acogió con satisfacción la resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas que pedía una “tregua humanitaria” en la Franja de Gaza, pidiendo su implementación inmediata y el envío urgente de ayuda.
Estados Unidos bloqueó la resolución, afirmando repetidamente que el proyecto de texto no contenía las palabras «Hamas» y «rehenes». Una enmienda presentada por Canadá en la que Ottawa quería añadir al texto una condena directa del ataque de las milicias fue rechazada.
A pesar de que la mayoría de 88 países expresaron su apoyo, la enmienda no fue aprobada porque no recibió dos tercios de los votos a favor.
Por razones similares a aquellas por las que los Estados Unidos de América votaron en contra de la resolución de armisticio, Italia se abstuvo de votar.
“Carece de una condena inequívoca de los ataques de Hamas contra Israel, no reconoce el derecho de cualquier nación atacada, en este caso Israel, a defenderse, y no menciona la exigencia de la liberación inmediata e incondicional de los rehenes del 7 de octubre. .” afirmó el embajador Maurizio Massari, representante permanente de Italia ante las Naciones Unidas.
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