Hoy en día la automatización en las líneas de producción se ha convertido en una necesidad para muchas empresas. No sola causa del distanciamiento y a otras medidas provocadas por la COVID19, también debido a lo competitivo de diferentes industrias.
Así, el UR5e es un brazo robot que tiene mucho que ofrecer en este sentido, sobre todo a pequeñas y medianas empresas en crecimiento. Se trata de un equipo desarrollado en función del futuro, es decir, su diseño le permite ampliar sus capacidades según el crecimiento de la compañía.
Sumado a esto, son indudables los beneficios de comenzar a incorporar brazos robóticos o robots colaborativos a las líneas de producción, sin importar el tipo de empresa o sector.
Y es que, la automatización es parte del ahora y los brazos robóticos son un elemento definitorio dentro de esta. Facilitando y promoviendo una mejor productividad, ahorrando tiempos y esfuerzo, pero manteniendo la calidad de los productos.
Todo esto les brinda a las empresas la oportunidad de mantenerse junto a la competencia, hasta con compañías de mayor tamaño. Este tipo de tecnología pone a disposición y de manera accesible la automatización colaborativa en diversas partes del mundo.
El brazo robot es el primer paso para la automatización
Para las empresas de menor tamaño puede resultar difícil tener acceso a los procesos automatizados, sin embargo, con los robots colaborativos esto es parte del pasado. El diseño y confección de estos colaboradores están especialmente estudiados para representar una inversión viable y accesible, con un retorno de inversión factible para empresarios de todos los niveles.
Así, un brazo robot o cobot tiene como propósitos generales convertirse en un trabajador versátil y adaptable. Pero que, además, logra integrarse de forma perfecta con la aplicación necesaria, teniendo una gran gama de compatibilidad.
Seguro, ligero, compacto y versátil son algunas de las palabras utilizadas para hablar de este brazo robot. No obstante, también resaltan por ser:
- De programación sencilla, los operarios sin experiencia en programación pueden configurar y manejar los brazos robóticos a través de una interfaz intuitiva.
- Flexibles y adaptables: su diseño que ayuda a ahorrar espacio y su composición ligera facilitan que sean reasignados fácilmente. Cambiar de proceso o de aplicación no es un problema para los cobots, por lo que la agilidad y la practicidad en la automatización están siempre vinculados a ellos.
- De instalación rápida: el tiempo para la puesta en funcionamiento de un brazo robot se ha acortado de semanas a solo horas y puede ser realizado por un operario no cualificado.
- Son seguros para colaborar con otros trabajadores: esto facilita que el personal humano sea reasignado a otras tareas, dejando a los robots colaborativos las acciones peligrosas, repetitivas, sucias y hasta aburridas. Lo que, a su vez, propicia una reducción en posibles accidentes laborales y errores o disminución en la calidad del producto.
Un brazo robot como el UR5e posee una gama de accesorios para hacerlo más óptimo para la tarea a la que será asignado. Entre estos se encuentran los kits de acabado, sistemas de fijación y las guías con inspector.
Todo esto convierte al brazo robot y a los robots colaborativos en la opción más viable para comenzar y alcanzar la automatización en pequeñas y medianas empresas de todos los sectores.
Permitiendo aprovechar mejor los recursos humanos, pero también optimizando y mejorando las líneas de producción y el resultado final de los productos con un menor margen de error y un mejor aprovechamiento del tiempo.
De hecho, se ha demostrado que los cobots pueden realizar tareas que de forma manual tardarían de 2 a 3 días en solo 4 horas, permitiendo competir a la empresa con fabricantes de mayor tamaño.
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